sábado, 3 de noviembre de 2007

CONCLUSION...

Se hace camino al andar...
...Y de esta manera concluimos esta rica experiencia formativa con varias ideas que, en estos pocos días, se han ido haciendo camino en “los surcos de nuestra alianza con Dios” y quieren transformase en convicciones…

En el camino de nuestra formación es importante “aprender a aprender” a ser y a hacer como FMA de manera que en nuestro vivir cotidiano, en las muchas relaciones, se exprese la riqueza de una humanidad asumida y vivida en plenitud.
Este encuentro nos ha hecho tomar mayor conciencia de la importancia de la tarea formativa que se nos ha confiado, por lo cual nos sentirnos corresponsables y en la urgencia de implicar, no solo a quienes se encuentran directamente trabajando con las jóvenes en formación, sino a toda la Comunidad Provincial hasta donde sea posible! Es darnos la palabra! Es tomar la palabra!

Sentimos que este encuentro viene a ser un evento de gran importancia en la conclusión de nuestro reciente Capítulo Provincial, donde uno de los principales compromisos ha sido el dar continuidad a los procesos formativos en acto en la Provincia.

Agradecemos a Sor Leslye Sándigo, Hermana Provincial, la oportunidad de haber facilitado estos días de reflexión y confrontación con la guía serena y fraterna de Sor María Fisichella. El haber hecho posible la realización de esta experiencia de Instituto, nos ha hecho sentir muy cercano el interés y el acompañamiento de a Sor María Américo, responsable del ámbito de la Formación a nivel General y de su equipo de colaboradoras.

Poseedoras de una gran fuerza que nos abre a grandes posibilidades, emprendemos juntas el camino, valorando cuanto en la línea de la formación hemos ido realizando a lo largo de todos estos años. La Provincia tiene los recursos para hacerlo, lo que queda es vivir, reflexionar y “ponerlo sobre el celemín para que alumbre a todos los que están en la casa”, con la certeza de que cuanto emprendamos y realicemos en esta tarea formativa será también parte de nuestro itinerario formativo personal como FMA comprometidas con la formación.
Al concluir, Sor María nos ha dicho: “Las invito a vivir esta experiencia como un proceso formativo de toda la Provincia! Al terminar habrán recorrido un itinerario formativo que con seguridad las hará sentir la necesidad de ponerse nuevamente en camino…!"

Nos animamos a continuar accensando y participando en esta “ventana” que se ha abierto hacia la formación en nuestra querida Provincia CAR!

Tercer día del Encuentro

Contribución de Sor Piera Cavagliá

Criterios que han guiado las orientaciones para la formación cultural de las FMA en el Proyecto Formativo del Instituto.

foto PF

Todos somos conscientes que a nivel social y eclesial existe una "emergencia" formativa preocupante.  Se constata en la experiencia del Instituto a pesar de tantas estrategias y programaciones.  El Proyecto formativo del Instituto de las FMA quiere ser una respuesta a las nuevas necesidades que surgen en las personas y en las comunidades.

La perspectiva de fondo
De frente a un mundo cada vez más pluralístico y en rápido cambio el Instituto realizó una opción estratégica:  la formación permanente.

No es sólo una acción que viene favorecida sólo desde fuera, con cursos convenios, lecciones, etc. Es sobre todo un proceso que viene desde el interno de las personas, es un camino de autoformación que se funda en la palabra de Dios, en el carisma del Instituto y evaluado en al cotidianidad.

  1. Síntesis entre contenidos y valores de fondo.
  2. La vida y la experiencia diaria es el taller donde la persona madura  y sintetiza fe y cultura
  3. No todo se puede aprender en la formación incial. Debemos "aprender a aprender" a través de experiencias, encuentros interpersonales, la cultura, la historia la belleza de la creación, arte, música y contemplación.
Criterios generales para la programación de los estudios

1. La visión del estudio como un estilo salpiencial de la realidad y como exigencia de fidelidad vocacional. El estudio no es sólo aprender un cúmulo de contenidos, es sobre todo adquirir criterios de juicio y de valoración crítica de la realidad y de las situaciones.

No se debe sacrificar la vida de oración, la vida comunitaria y la misma seridad de la formación cultural por el afán de conseguir un título de estudio sin una justa jerarquía de valores y criterios de discernimiento.  La formación -sólida y sistemática- pone las bases para la vida de la futura educadora de jóvenes.

Se necesitan personas que sepan pensar, que tengan sentido crítico y que no se dejen arrastrar de las modas dominantes. Un estudio serio, iluminado por la Palabra de Dios y de una mentalidad evangélica realiza la síntesis vital que unfica la persona y la hace responsable en la comunidad y la sociedad.

 

2. Claridad en el cuadro de referencia carismático para una asimilación conjunta de valores. Son muchas la fuentes de información y de formación que nos enriquecen con conocimientos y valores. El objetivo de la formación de una FMA es expresar y profundizar siempre más la identidad de una educadora salesiana consagrada a Dios y dedicada toda a la misión que le ha sido confiada. De frente al relativismo imperante no se renuncia al valor primario de nuestra identidad FMA, que no es un valor confictivo o disgregante, al contrario, es el factor de integración y de estabilidad.

Nuestra formación tendrá un característico snetido eclesial como criterio de fidelidad carismática. En esta óptica de comunicón, nosotras FMA, trabajamos en sinergia con la Familia Salesiana y con todas la vida religiosa actual y así nos comprometemos a profundizar la dimensión femenina y mariana como el aporte específico a la Iglesia y al mundo.

Otro aspecto importante de nuestro carisma es el de la cultura de la comunicación, base para abrirnos a los nuevos lenguajes que deben estar presentes en los currículos de estudio, con la finalidad de situarnos críticamente en este "nuevo areópago" donde la fe espera una nueva inculturación.

 

3. La "inculturación" es otro criterio importante. Se debe adaptar la propuesta del Instituo, de caracter orientativo, a las situaciones, a las Provincias, a las personas concretas, a los retos educativos del lugar. El camino formativo exige que sea repensado y traducido a nivel local, para que tenga un rostro concreto y dinámico.

Éste es el reto de cada Provincia:  Vivir la unidad del carisma en la diversidad de las expresiones culturales que respondan a la realidad de un Instituto Internacional e Intercontinental sin alejarse del espíritu de los fundadores.

4. La personalización de los planos de estudio. Sobre todo en la formación inicial es indispensable para ayudar la asimilación de los contenidos de crecimiento en la corresponsabilidad de las jóvenes.  En la actual realidad del analfabetismo religioso, es necesario un estudio sistemático de las ciencias religiosas que se concluya si es posible con una diploma adecuado.

5. Método de aprendizaje circular, donde la reflexión teórica y la experiencia práctica se enriquezcan recíprocamente.

 

6. Evaluación periódica de los contenidos, del método, del provecho obtenido. Implicar en este proceso las jóvenes en formación, las profesoras y profesores, las formadoras y la misma comunidad, para que el proceso sea cada vez más convergente.

 

Criterios específico que guiaron la redacción de las Orientaciones

Ésta parte, como todo el Proyecto Formativo, fue realizado con la colaboración de tantas hermanas y salesianos que realizan experiencia directa en las casas de formación, como animadora o como docentes del proceso.

Se ha querido ofrecer al Instituto una línea unitaria de formación cultural donde podamos reconocernos y que respondan a las exigencias formativas evidenciadas en las diveras partes del Proyecto formativo.

Se ofrecen las "Orientaciones" para que cada Provincia organice una programación orgánica y unitaria del estudio para una formación sólida y continuamente actualizada.

Conociendo el pluralismo de la realidad de nuestras diferentes Provincias, las orientaciones son de carácter indicativo.  Entre las áreas disciplinarias indicadas: teológica, histórica, ciencias de la educación... sugiere evidenciar en particular aspectos típicos que ayuden a profundizar la identidad carismática del Instituto: la perspectiva educativa, la figura de María, la vida religiosa, la mujer, los y las jóvenes.

Propuesta de itinerario para  el conocimiento vital del carisma

Ésta parte del Proyecto formativo es importante porque se refiere al carisma del Insituto que configura nuestra vocación y porque responde a muchas peticiones de las formadoras de las FMA.

 

1.  La riqueza del carisma no puede ser sólo estudiada desde un punto de vista, se necesita un enfoque interdisciplinar.

 

2. El conocimiento del carisma, exige un constante enriquecimiento mutuo entre elementos teóricos y prácticos, reflexión y experiencia, estudio y oración, maduración personal y apertura comunitaria.

Es la comunidad, el lugar privilegiado de formación, donde cada una crece en corresponsabilidad de la actuación del carisma educativo.

 

3. El método puede ser variado siempre y cuando repete los criterio de gradualidad  e integración orgánica y no absolutice los itinerarios metodológicos en detrimento de otros. Mantener la integralidad de las perspectivas siempre es el camino más oportuno y fecundo.

El Proyecto formativo indica algunos caminos metodológicos:

- Lecciones sitemáticas, utilizando documentos "fuente" y aportes cuidadosamente escogidos. Presentación de éstos documentos con la debida introducción, ediciones críticas y comentarios actualizados.

- Iniciación a la lectura personal guiada, tabajo de investigación individual y de grupo. De aquí la importancia del estudio del idioma italiano, para acceder directamente a las fuentes y para una comunicación enriquecedora, en comunidad y en los encuentros internacionales.

- Valorización de experiencias comunitarias y apostólicas que sean significativas: momentos de intercambio comunitario, preparación de fiestas y conmemoraciones salesianas, preparación y realización de fiestas y encuentros con la participación de jóvenes y Familia Salesiana, peregrinaciones y visita a obras educativas de frontera, encuentros con peronas ricas de experiencia salesiana.

Recordar que para asimilar la espiritualidad del Instituto de un modo más consciente y profundo es necesario la gradualidad y el tiempo que se debe dedicar al estudio, a la lectura, a la investigación y a las relaciones interpersonales.

viernes, 2 de noviembre de 2007

Sor María Fisichella y Equipo de formación - CAR

Formacion_01

Sor María Fisichella, Sor Leslye Sándigo -provincial- y hermanas del equipo de formación

 

Por la tarde se trabajó en el perfil de FMA para la Provincia CAR.

 

El ideal para alcanzar este perfil es iniciar con la formación permanente

Cuáles son los elementos fundamentales para este proceso?

  1. Definir el perfil de FMA en la formación permanente
  2. Individuar las etapas y las características de cada grupo según las edades.
  3. Identificar los elementos formativos, característicos de cada fase.
  4. Acompañar el proceso en cada comunidad a dos niveles: comunitario y personal.

La animadora de comunidad debe ayudar a cada hermana a elaborar su propio proyecto de formación personal: coloquio, valores, propuesta de formación comunitaria. La animadora debe también animar y acompañar el proceso formativo comunitario. Éste depende en gran parte del clima comunitario que cada hermana es responsable de crear, pero del cual al mismo tiempo se enriquece.  En este ciclo de enriquecimiento mutuo, personal-comunitario es como la tensión formativa genera vida y la promueve.

Una prioridad de la Hermana Provincial es acompañar a las "acompañantes" o sea a las animadoras de comunidad, activando distintos procesos donde la animadora es "sujeto" y a la vez "objeto" de formación.

Entre estos elementos es importante tener presentes las tareas de desarrollo que llegan a ser los puntos firmes para poner en movimiento simultáneamente: pastoral vocacional, formación permanente y la formación inicial.

 

 

 Itinerarios-proceso

Resonancias sobre el proceso de formación

Sor María Fisichella inicia el día retomando las inquietudes y reflexiones que surgieron del trabajo de ayer. Entre los aportes de la Asamblea más importantes:

  1. Se ha valorizado mucho la necesidad de "gastar tiempo", reuniéndonos para socializar los criterios, ideas, itinerarios, espectativas, logros y dificultades de toda la etapa formativa. No trabajar en sectores o según interpretaciones personales o como "se cree" que es mejor. 
  2. El objetivo de la formación es la "identidad carismática", éste es el punto de llegada, no importa el enfoque siempre y cuando exista recta intención de búsqueda de la Voluntad de Dios, porque no existe un único itinerario formativo.
  3. Los criterios formativos deben ser elaborados por juntas y por un "grupo el más grande posible", compartir este proceso con el mayor número de hermanas y comunidades para que cada una se sienta protagonista en primera persona y así todas partícipes del proceso.
  4. El elemento "subjetivo" no puede ser minimizado, los itinerarios y criterios están hechos por personas, pensados para personas y llevados a cabo por personas.  Ésto eleva al máximo el aspecto subjetivo, de libre interpretación, de limitaciones personales, de visiones y modos de concebir la formación. Se debe aceptar esta limitación y dar el voto de confianza que las personas responsables estén actuando con la mayor rectitud de intención, buscando de alcanzar los objetivos formativos propuestos.
  5. Los objetivos deben estar pensados y proyectados para dar respuesta al HOY, a la joven de hoy, a las exigencias de la Iglesia de hoy, a las exigencias de la pastoral de hoy, a las exigencias de la educación de hoy.  Así la joven formanda se sentirá capaz de dar respuesta en las diferentes comunidades donde se insertará.
  6. Recordar siempre que nunca se formará la "FMA perfecta",  no habrá jamás una comunidad formativa perfecta, ni situaciones perfectas, por eso estar siempre conscientes y en actitud de mucha humildad de frente a Dios que nos confía esta gran responsabilidad, delante de Él buscar cómo dar respuesta de la mejor forma posible.
  7. Recordar que la protagonista de este proceso es siempre la "formanda", las formadoras deben sólo facilitar y ayudar a que la joven haga su camino de formación, cualquier criterio y objetivo escogido de la formación debe responder a la finalidad carismática y a las necesidades del hoy.
  8. Todo el equipo de formación debe ser el "canal" que sea capaz de comunicar los "por qué" y "para qué" de las opciones formativas escogidas, proyectuadas y actuadas.  Esto va creando "mentalidad formativa".  Cuando las hermanas todas sabemos qué se está haciendo y cómo, entonces se va creando el proceso de implicación formativa en toda la Provincia.
  9. El problema formativo de nuestra Provincia no está en tanto en la metodología de la implicación, porque esta metodología se realiza en otros ambitos.  El problema está más en fondo, es un problema de mentalidad, está en los procesos y criterios "personales" que se quieren llevar adelante.  El problema es ponernos juntas y creer, dar confianza a la hermana encargada de la formación. No creemos que la formadora sea capaz.
  10. Nuestros ojos tienen que estar en el "perfil de FMA" de acuerdo con la identidad carismática. No debemos sólo mirar sólo la joven que viene, porque al adecuar la propuesta cada año, no se favorece la estabilidad de la propuesta formativa. No se puede sacrificar el "perfil de FMA" por el itinerario personal, se deben poner los dos elementos dentro del proceso.
  11. No se debe olvidar las diferentes exigencias de "itinerarios personales" e "itinerarios grupales". Especialmente en la realidad de grupos heterogéneos, dar respuesta a los dos niveles nos exige buscar no el "éxito en", sino los "elementos transversales" que revelen la predisposición hacia nuestra vida religiosa salesiana que satisfaga los requisitos mínimos de la etapa.
  12. Los itinerarios formativos no deben centrase solamente en los objetivos pastorales, sino sobre todo la primacía de la respuesta a Dios.  La formación está dirigida a ayudarnos a mejorar nuestra respuesta en fe a Dios. El peligro de nuestras casas de formación está en dar prioridad sólo al aspecto de estudio o pastoral olvidando el aspecto de crecimiento de respuesta vocacional.

jueves, 1 de noviembre de 2007

Formación: Principios de fondo

La formación a la vida religiosa está atravezando momentos difíciles en todo el mundo, al mismo tiempo es un período rico de oportunidades.

Hasta hace poco conocíamos modelos de estabilidad, rígidos, lejos de los paradigmas dinámicos que es exigida por la realidad con continua y rápida evolución. 

Hoy tenemos la necesidad de seguir el camino trazado de la tradición carismática y formativa propria de nuestro Instituto, pero a la vez sentimos la necesidad de abrir nuevos caminos y de revisar nuestros modelos y procesos formativos.

Uno de los éxitos más significativos de éstos último decenios ha sido el pasar de un modelo educativo e identificación con los ideales o de asimilación de algunos contenidos doctrinales y prácticos a una concepción de la formación como proceso personal de crecimiento.

Otro gran paso ha sido el definir algunos principios fundamentales en la formación permanente como en la formación inicial.

Puntos de reflexión:

La formación debe ser integral

La formación debe ser personalizada

La formación debe ser experiencial

La formación debe ser permanente

La formación debe ser progresiva y gradual

La formación debe ser acompañada

Formación como itinerario de vida

"La formación debería tener la capaciadad de proponer un método rico de sabiduría espiritual y pedagógica que conduzca progresivamente a quien aspira a consagrarse a asumir los sentimientos de Cristo Señor" (VC 65)

El proceso que conduce a la formación de la identidad carismática presupone las etapas de crecimiento que no se pueden saltar: la redefinición de la propia identidad personal, la revisión y la consolidación de la identidad vocacional, el descubrimiento y gradual asunción de la identidad carismática.

La formación que tiene como meta la construcción de una identidad, no puede reducirse a experiencias de comunicación verbal de contenidos, mediante cursos, seminarios, estudios, etc. sin favorecer al mismo tiempo experiencias formativas que toquen la vida y el crecimiento personal.

La formación no puede concentrarse sólo en el "éxito final".  No se puede juzgar la formación según los resultados finales, según los objetivos que se propuso alcanzar, sino que se necesita mirar ante todo el "recorrido que se debe hacer" para llegar a esos resultados.

Orientaciones Formativas

Sor María Fisichella nos presenta reflexiones sobre los modelos y formas de concebir la formación no sólo desde el punto de vista religioso, sino formación a todo nivel. Entre todos, presenta los más importantes y los agrupa en dos categorías divididos en 5 orientaciones o modelos.

1. ACTORES:  Traspaso de conocimiento, Develación, Cambio del punto de vista

2. AUTORES: Co-construción de procesos de conocimiento, Construcción de representaciones.

Según el modelo de formación, los actores y agentes formativos cambian de rol y función. Se presenta un análisis según los modelos:

1. Transmisivo - Conductista

2. Emulativo - Modeladora

3. Participativo - Re-elaborativo

Elementos constitutivos Transmisivo
Entrenamiento
Emulativo Participativo
Re-elaborativo
Imágnes del encuentro formativo Presentación de un texto importante para la formadora Muestra como lo hace la formadora y lo hace repetir Experiencia de confrontación y de búsqueda
Rol de la formadora Espectadora Aprendiz Autora
Rol de la formadora Actor único Director Co-autora y experta del método
Función del grupo - comunidad De contorno, relleno Recipiente funcional Sujeto
Co-protagonista
La experiencia pasada y actual Poco útil Importante sólo aquella de la formadora Necesaria, sino indispensable
Relación con los contenidos propuestos Dependencia y no negociables Recepción según la propia interpretación Construcción a través de la contribución de todas
Estilo de comunicación y su función Directivo
Transmisor
Seductivo

Circular
de Intercambio

Comparte: Cómo recuerdas el período de formación?

Las hermanas de encuentro de formación fuimos invitadas a recordar nuestro proceso formativo y de describirlo con una imagen, metáfora, positivo o negativo, sin juzgar el pasado.

Entre las imágenes ofrecidas por las participantes:

Orquesta, camino, caída de agua, viaje, jardín, vestido-hábito, ánfora, fuente, canoa, etc.

Además de la metáfora o idea que representara nuestra formación personal, se nos invitó a definir con esa imagen quién era el formador y la formanda.

Jardín:  Formador=Jardinero, Formanda=planta

Canoa: Formador=Construye la canoa (madera), Formanda=Canoa

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El blog se abrió con la posibilidad de ser anónimo, si quieres!

Encuentro de formación con Sor María

IMG_3967 Costa Rica, Casa Provincial - Nuestra Señora de los Ángeles.  Del 1 al 3 de noviembre del 2007 se está llevando a cabo el encuentro de las hermanas del Consejo Provincial, Equipo de formación y directoras de comunidades donde están presentes las hermanas junioras con Sor María Fisichella, para reflexionar juntas a la luz del camino provincial en acto, sobre las exigencias y sobre "cómo" traducir el Proyecto Formativo en itinerarios específicos para cada etapa formativa y para cada una de las diferentes etapas de la vida.

 

Objetivos del encuentro:

  1. Compartir las "representaciones-imágenes"  sobre los significados de: formación e itinerarios formativos.
  2. Recordar la lógica del Proyecto Formativo
  3. Reflexionar sobre el "modelo formativo" propuesto por el Proyecto Formativo del Instituto y sobre las orientaciones formativas más adecuadas para actuarlo.
  4. Escuchar las "debilidades" y las "fortalezas" de los sujetos de la formación.
  5. Realizar un borrador de un itinerario formativo y del plan de estudios o, revisar y orientar alguna de las etapas.
  6. Promover la elaboración compartida de los planos de estudio para la formación cultural de las FMA en las etapas de la formación inicial
  7. Compartir criterios y modalidad de trabajo que permitan la elaboración autonoma de otros itinerarios con sus planes de estudio.
Método: Taller para

- Favorecer la confrontación e individuar criterios y modalidad de trabajo transversal a todo el proceso formativo

- Hacer juntas el itinerario de una etapa que podría ser paradigmático para la elaboración de itinerarios formativos de las varias etapas de la vida.

Bienvenida Sor María Fisichella

Las Hijas de María Auxiliadora de la Provincia Nuestra Señora de los Ángeles (Nicaragua, Costa Rica y Panamá) da la más cordial bienvenida a nuestra querida hermana, Sor María Fisichella. Ella trabaja en el ámbito de la Formación en Roma, colabora directamente con Sor María Américo y otras hermanas.